Las avispas son fascinantes y terroríficas a la vez. En esta entrada, exploramos las diferencias entre las tres especies más populares: la avispa germanica, la avispa vulgaris y la avispa asiática.
Vespula germanica
Es originaria de Europa pero se ha establecido en otras partes del mundo como Norteamérica, América del Sur o Australia y Nueva Zelanda. Con su color amarillento y negro y sus mandíbulas pronunciadas, esta especie agresiva y territorial defiende su nido con ferocidad. Si os encontrais con estas avispas, mejor mantener la distancia y no molestarlas.
Vespula vulgaris
También conocida como “avispa común”, es similar a la vespula germanica en apariencia, pero con algunas diferencias sutiles en su morfología. Esta especie construye sus nidos en árboles o estructuras humanas como cubiertos, buhardilla, etc.
Vespula velutina
Es originaria de Asia y ha colonizado varias regiones, incluyendo Europa. Con su color negro y una banda naranja en el abdomen, esta especie es depredadora y puede ser extremadamente perjudicial para las abejas autóctonas.
Por otra parte, es necesario tener en cuenta algunos términos técnicos como por ejemplo:
• Las avispas pasan por una metamorfosis completa, que incluye etapas de huevo, larva, pupa y adulto.
• El nido primario es el nido original fundado por una reina fecundada durante la primavera. Es el punto de partida de la colonia y normalmente, se encuentra en lugares escondidos y protegidos como cepas de árbol, cavidades subterráneas… Los nidos secundarios (o satélites) son nidos construidos por las obreras para criar más avispas y conseguir que la colonia sea más grande.
• Cuando las avispas se sienten amenazadas cerca de su nido, pueden empezar a volar en círculos alrededor del mismo. Este comportamiento tiene varios propósitos: la defensa del nido (y por tanto, la protección conjunta de la colonia), la confusión de la amenaza (volar en círculos puede confundir o desorientar a los posibles depredadores o intrusos) y por último, la comunicación química: durante la acción de volar en círculos, las avispas liberan feromonas de alarma que pueden ser detectadas por otros miembros de la colonia, hecho que permite una comunicación química rápida y eficiente para alertar a otras avispas y coordinar la acción conjunta frente a la amenaza.
Las avispas pueden ser temibles pero son parte de la maravillosa diversidad de la naturaleza. Así que, recuerda mantenerte a una distancia respetuosa y ¡disfruta del espectáculo!